¿Qué es el cáncer cervicouterino?

El cáncer cervicouterino se origina en el cuello del útero y se desarrolla lentamente a partir de lesiones precancerosas. La infección persistente por el virus del papiloma humano (VPH) es la principal causa de esta enfermedad. En etapas iniciales, suele ser asintomático, lo que resalta la importancia de los exámenes de detección periódicos. Síntomas comunes En etapas avanzadas, el cáncer cervicouterino puede presentar los siguientes síntomas: - Sangrado vaginal anormal, especialmente después de las relaciones sexuales, entre períodos menstruales o después de la menopausia. - Flujo vaginal acuoso y con sangre, que puede ser abundante y tener un olor fétido. - Dolor pélvico o durante las relaciones sexuales. Prevención y detección precoz La prevención del cáncer cervicouterino se basa en: - Vacunación contra el VPH: Recomendada para niñas y niños a partir de los 9 años. - Exámenes de Papanicolaou (PAP): Se recomienda realizarlo cada 3 años en mujeres entre 25 y 64 años. - Pruebas de detección del VPH: Permiten identificar infecciones por tipos de VPH de alto riesgo. Estos exámenes permiten detectar lesiones precancerosas y tratarlas antes de que evolucionen a cáncer. Acceso al GES y cobertura financiera El cáncer cervicouterino está incluido en el GES, lo que garantiza: - Diagnóstico: Acceso a exámenes como PAP y biopsias para confirmar la presencia de lesiones. - Tratamiento: Incluye cirugía, radioterapia, quimioterapia y braquiterapia, según la etapa de la enfermedad. - Seguimiento: Controles médicos periódicos para monitorear la evolución y detectar posibles recidivas. Los tiempos máximos de espera establecidos por el GES son: - Informe de PAP: 30 días desde la realización del examen. - Confirmación diagnóstica: 40 días desde la sospecha. - Etapificación: 20 días desde la confirmación diagnóstica. - Inicio de tratamiento: Varía según el tipo de lesión, siendo 180 días para lesiones de bajo grado y 20 días para cáncer invasor. Importancia del diagnóstico temprano Detectar el cáncer cervicouterino en etapas iniciales aumenta significativamente las posibilidades de tratamiento exitoso y supervivencia. Por ello, es fundamental que las mujeres realicen sus controles ginecológicos periódicos y sigan las recomendaciones médicas.

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